Lo que me pasó con este juego no es muy normal, de hecho el primer contacto con este juego fue en una especie de juego flash promocional que en su tiempo con 12 años jugué en la página oficial de Cartoon Network y quedé enganchado a él; para estos tiempo tan siquiera recuerdo que tan semejante era al producto final… yo supongo que tendrá unas claras bases pero llevadas a la mínima expresión para venderte el producto.
Después de 8 condenados años de mi primer contacto con el juego aquí presente por fin pude sacarme la enorme estaca en forma que significada tener este título como uno de los pendientes, de hecho durante varios años traté de conseguir el antecesor disponible en la GBA pero tampoco tuve suerte, total, que a pesar de contar con la ROM desde hace 2 años apenas saqué tiempo para ponerme un poco serio con él.
El resultado me deja bastante satisfecho, no esperaba encontrarme con una obra con tantísima magia en cada uno de sus circuitos, la mayoría impuesta por la edad, debido a lo increíble que me resultó en su tiempo la “demo” jugada en internet; aun así, sin resultar un juegazo lo disfruté muchísimo.