El
otro día mientras ordenaba y ponía en bolsas para cadáver ingente cantidad de
objetos que ya hacían en la puta cueva que llamo habitación me encontré esta
cosa:
No
sé por qué –quiero aplazar lo más que se pueda el siguiente Boku-, pero quería
compartir este significativo momento con ustedes. Cuando le tomé fotos a este
pequeño aparato pensé en simplemente acompañar la imagen con un texto de 5
líneas y a tomar viento fresco hasta mañana… pero qué mejor que compartirles mi
efímera experiencia con el armatoste que actualmente no funciona, venga.