Este mes ha sido de los más inusuales que ha vivido el Blog, la afluencia de visitas traidas por el anime ha superado con mucha diferencia a las recaudadas por las reseñas de videojuegos. Si bien en la lista de entradas más populares de la semana esto no se aprecia mucho, en las estadísticas se detecta como la gran mayoría de las series son visitadas, por no decir que algunas entradas como Serial Experiments Lain permanecieron un mes seguido. Es irónico cuanto menos sobre todo porque estoy muy lejos de hacer un blog realmente centrado al anime. En fin.
La serie presentada por un servidor el día de hoy es considerada por este mismo como de las obras más entretenidas y de mayor calidad en lo que va del año. No pude evitar el comienzo de su visionado totalmente entusiasmado con expectativas tremendamente altas como con otras –Umineko No Naku KoroNi- por lo tanto sentía un real miedo a decepcionarme pero para mi sorpresa rompió la barrera que le había puesto, superando todo lo esperado, Planetes pasa a ser de las pocas series recomendadas por mi persona te guste o no el anime.
Basado en un manga del mismo nombre y emitido si mal no lo recuerdo en el año 2003. La trama se centra en el trabajo que un equipo de recolección de basura hace para eliminar las amenazas en forma de chatarra flotando en el espacio, representando un peligro enorme para cualquier nave. El equipo con esta tarea resulta ser la sección de Tecnora –una estación espacial que funciona como base de operaciones- con más carencias de todas, son la parte más baja de toda la pirámide de jerarquías y continuamente reciben burlas de otras secciones a pesar de tener el rol más peligroso de todos. Un buen día la sección recibe a un nuevo empleado, la joven Tanabe, que ve con horror el chiste de sección donde ha llegado a parar.
Vale, he mencionado a la sección de recolección de basura como unos pobres infravalorados, unos verdadero héroes incomprendidos y tal, sin embargo es llegar Tanabe al lugar de trabajo y comprobar que el caos reina, teniendo como jefes a dos verdaderos estúpidos y como compañeros a personas tan desorganizadas. A partir de aquí los personajes principales comienzan a mostrarse, siendo el principal junto a Tanabe el hombre llamado cariñosamente Hachimaki, un recolector experimentado. Desde un principio los roces por las formas tan diferentes en pensar entre los dos aparecen, llegando a discutir inclusive en el espacio durante plena misión, sin embargo por motivos que no especificaré la relación de todo el equipo cambia.
Planetes es de esos casos tan comunes con episodios iniciales que sin ser jodidamente malos no se comparan para nada a los compases más avanzados de la trama. Dicho esto los primeros episodios tiran más a situaciones cómicas y malentendidos, ya sea porque el equipo de la sección está bien pendejo o porque existen muchas broncas entre los protagonistas y sus notorias diferencias. Pero aun así logra comenzar a transmitir su esencia.
Desde el inicio el enfoque dista mucho de solo dignarse a contarnos las peripecias del equipo recolector de basura, que también son parte fundamental, nos muestra la evolución constante de personajes y entornos ya sea por la introducción de estos o sucesos de gran trascendencia para la trama. Con esto quiero decir que en la gran mayoría de los episodios vemos pequeñas historias que de alguna manera se ligan con los protagonistas y con esto me refiero inclusive a los primeros.
Que si, al principio como he mencionado antes la serie se centra mucho en ofrecer escenas cómicas sin venir al caso pudiendo perfectamente ahorrárselas pero no por eso dejamos de ver momentos muy emotivos o que a la larga tendrán otra mención.
Conforme los episodios pasan la comedia es disminuida al máximo y los tintes dramáticos salen a relucir, tragedias, engaños y demás sorpresas son manejados maravillosamente pues algunas cosas no te las esperas ni de puta broma. Lo que al inicio solo es una serie centrada en el trabajo y vida cotidiana de los protagonistas más aparte de aquellos que se encuentran en el camino agarra magnitudes enormes y se arma un buen desmadre con rollo de ideologías y política incluido como el uso de los materiales que son recolectados de la luna, el trato preferencial de las compañías espaciales a las potencias mundiales sin olvidarse de temas tan personales como el amor, los sueños, esperanzas y objetivos individuales.
Quisiera con toda mi alma profundizar sobre lo dicho anteriormente pero sería chafar parte de la trama.
Tengo que reafirmar lo increíble que me ha parecido ese acercamiento a las personas y la priorización por aspectos pequeños que afectan solo a su más cercano espacio por encima de todo el entorno y tecnología que da para profundizar en ello muchísimo, es curioso decir, pero a pesar del ambiente futurista tan bien hecho Planetes también es lo más realista que he visto junto con Monster.
No por esto quiero decir que todo el día nos la vamos a pasar viendo los dramas de Tanabe con el resto del equipo y sus malentendidos con eróticos resultados o pláticas extensas sobre la situación política de Venezuela, Planetes también tiene sus escenas moviditas con golpes, disparos y toda esa parafernalia sin llegar a extremos ridículos, no por ser del espacio futurista vamos a ver guerras de millones de naves o movimientos espectaculares imposibles a la velocidad del vértigo pues hasta en eso le han dado cuidado para limitarse a lo más cercano a la realidad en cuanto a leyes de gravedad y demás mamadas que ignoro, pero no por eso resultan menos interesantes o entretenidas, inclusive tiene una buena ración de escenas angustiantes en el puto espacio y consiguen transmitir esa tensión sin muchos problemas.
Vale, les he hablado de los rasgos más destacados de la trama revelando lo menos posible de esta, porque está de poca madre ¡Cabrones tienen que verla les guste el género que les guste! Sin embargo me he dejado lo más importante, los personajes.
Hachimaki resulta ser un sujeto bastante explosivo y poco paciente, saliendo a relucir este lado de su ser cuando le toca entrenar o instruir a Tanabe en sus primeras incursiones hacia el espacio exterior. En cambio Tanabe es una ilusionada, optimista y alegre trabajadora que vela por todos sus compañeros y por esto mismo los problemas con su mentor son muy constantes. Hachimaki se presenta como una persona estancada en el mismo puesto desde hace años con un sueño infantil de tener su propia nave espacial así mismo Tanabe le hace ver estos puntos negativos haciendo que este se muestre bastante agresivo u ofensivo con ella. En la misma sección de basura se encuentran los jefes, un par de inútiles que solo sirven para animar fiestas o para simplemente servir de figura con autoridad y por último está el resto de compañeros, una fumadora encargada de manejar la nave con la que salen a trabajar, un reservado hombre fanático de los animales y una empleada temporal.
Poco más puedo decirles en la descripción de los personajes para evitar destripes. Todos evolucionan a lo largo de los acontecimientos y para nada se tiene la sensación de que están ahí de relleno o nomas sirven para escasos momentos, no señor, si algo queda claro es el desarrollo muy profundo entre los personajes y los lazos tan estrechos que tienen los unos con los otros. El elenco es realmente grande y da igual si solo aparece un episodio, la gran mayoría resulta vital y enriquecen el universo donde se ambienta Planetes pues proceden de secciones más importantes o se relacionan con los temas políticos hablados anteriormente.
El apartado artístico me ha parecido maravilloso aun teniendo a sus espaldas 10 años. El estilo de dibujo es más realista que la mayoría mostrando rasgos nada exagerados al igual que el abanico de movimientos común que cualquier otra persona tendría, en ningún momento que recuerde es utilizado el recurso de los cambios repentinos de rostro irreales –como lo son borrar totalmente los ojos o en su defecto el típico cambio a totalmente blancos por desconcierto- . Todo personaje es distinguible por sus rasgos característicos dado a que inclusive proceden de diferentes nacionalidades.
La animación es dinámica y en todo momento sigue la tónica realista como en escenas donde la gravedad es mucho menor o donde no existe como en las escenas de recolección, con movimientos pausados pero fluidos, realmente escenas trepidantes como tal no existen y por el entorno debe de entenderse esto, no es para nada malo pero quiero remarcar esto.
Aun siendo escenarios ambientados en el supuesto 2075 estos siguen pareciendo muy familiares, osea, no exageran en ofrecernos entornos altamente tecnológicos con muchas luces, cables, color cromo o metal, pero aun así se notan los avances del tiempo sobre todo en los encuadres donde se ven estructuras/naves gigantescas en todo su esplendor en movimiento.
Hablando de planos, encuadres y esas chingaderas, me ha gustado mucho la posición de la cámara –es un decir- cuando suceden cosas en el espacio con planos de la tierra en todo su esplendor o haciendo parecer insignificante al personaje en comparación de todo lo que lo rodea, logra muy buena ambientación al dar fe de la enorme magnitud del universo y lo poca cosa que somos en su comparación…son las 3 de la mañana, perdonen mis chingaderas.
En general ya poco queda que decir, de todo lo visto en mi vida la considero de lo mejor y no puedo agregar nada más. Tengo entendido que el anime se toma libertades respecto al manga original y a partir de la segunda mitad toma un aire muy distinto, a saber cual sea mejor, no soy de leer mangas, pero si consigue superar lo visto en la adaptación, tendría que considerar mucho su leída.
Por el momento es todo compañeros, espero verlos muy pronto y ahora sí, es hora de la calificación total.
TOTAL: 9
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