domingo, 15 de marzo de 2015

Reseña NDS: Contra 4



Tenía milenios sin actualizar el blog y con justa razón, las cosas se pusieron muy complicadas en mi vida si hablamos en términos generales, la verdad… pero vamos, son de esas cosas que al final te hacen más espabilado, te replanteas algunas cosas y –como no- sales más curtido y maduro, ya sé que no es algo que importe en lo absoluto para aquellos que vienen a leer mis dagas pero hasta cierto punto necesitaba dejar nota en este espacio, digo… es mi puto blog y me lo cojo cuando quiero.

Al asunto de esta semana. Contra siempre ha sido una de las sagas con mayor estima en esta casa a pesar de que precisamente estemos ante la primera entrada dedicada a tratar sobre uno de sus juegos. En los tiempos de NES rompieron los moldes al ofrecer un título épico en todos los sentidos; gráficos espectaculares, una banda sonora de infarto, una mecánica de juego divertida a la par de sencilla y completa, pero lo que terminó por romper el molde e impulsar el título de Konami al Olimpo de la crema y nata de los videojuegos fue su fantástico multijugador, implementado de una manera magistral dándonos un equilibrio divino entre momentos donde la ayuda extra viene como agua de mayo o al contrario… convirtiendo la partida en una competencia por joder lo máximo posible –el nivel de desplazamiento vertical en la cascada es el perfecto ejemplo- . El bestial éxito de la primera entrega, con versiones en todas las plataformas posibles aunque la de NES es la más famosa,  le valió para consagrarse y lanzar juego tras juego en diversas plataformas.

domingo, 1 de marzo de 2015

Reseña NDS: Ninja Gaiden: Dragon Sword






Estamos agarrando mucho vuelo con las reseñas de NDS y es una tendencia que seguirá bastante tiempo de forma segura, digo, me siento contento con todo el catálogo que la pequeña portátil de Nintendo tiene y dado que no me apetece gastar tiempo en partidas largas decantarme totalmente por esta me viene de perlas; además es mi consola fetiche de momento, hace tiempo perdí mi antigua NDS y hasta hace apenas 4 meses pude conseguir otra… desde entonces es un no parar con juegazo tras juegazo.

Venga, dado el carácter tan tremendamente arcade y simple de algunos juegos las reseñas se resentirán en cuanto a extensión… no pensaba estirar el chicle de forma brutal pues es algo muy notorio a simple vista y sencillamente no es mi estilo, mucho menos ahora que el tiempo en ocasiones no apremia demasiado; bastante cómico cuando justamente ahora siento unas ganas locas de compartir mis impresiones y dagas varias, pero lástima, algunos asuntos representan prioridades y actualizar este espacio obviamente no es una de ellas, a pesar de que lo quiero mucho y me sigue chiflando ver los comentarios acumulados en los post que publico.

La idea de hoy era seguir con las reseñas cortas y veo este como el momento perfecto para escribir sobre Ninja Gaiden: Dragon Sword. Verá, la saga nunca ha sido santo de mi devoción, la última entrega de la serie es una puta mierda y no he podido conseguir Ninja Gaiden II que para muchos es crema pura, aun así mi curiosidad me ha llevado a terminar el título original de NES que a pesar de su endiablada dificultad tiene una mecánica de juego deliciosa a la vez de adictiva y claro, desde hace muchos años tengo en su forma original la entrega exclusiva de NDS.