Durante
estas cuatro semanas le hinqué el diente a varios indies, algunos
ameritan reseña y otros son tan simples que con dos párrafos me
bastan, siguiendo la tónica de hace algunos días con mi entrada
sobre las impresiones iniciales de juegos de PS2 emulados con PCSX2
haré lo mismo con los diversos juegos de PC que con el tiempo vaya
jugando.
Algunos
no volverán a aparecer en este blog en forma de reseña pero otros
títulos que tienen un poquito más de carne sí que se volverán a
dar una vuelta. Las condiciones para aparecer aquí son simples: el
costo completo del título no superará los 150 pesos –7 euros al
cambio-, tienen que ser considerados indies a mi ver con lo que esto
conlleva y por lo menos debí haberlos jugado un mínimo de 4 horas
o, en caso de durar menos, terminarlos. Por cada entrada aparecerán
4 juegos y la sección se publicará cada vez que se me hinchen los
huevos -probablemente una vez al mes-. Vamos a ello.
Una
disculpa anticipada por el precio, que estará en moneda mexicana y
por ende es sustancialmente más barato que en España o un poco más
caro que en otros países de América del sur.
Super
Hexagon
Precio:
Mex$ 36
Un
juego de aspecto simplón que visto en movimiento es una putísima
locura capaz de engancharte más que cualquier droga. Super Hexagon
tiene la primicia más simple de la historia de los videojuegos, tú
eres un pequeño triángulo y debes sobrevivir un minuto a cada uno
de los tres niveles que componen el juego. Suena jodidamente sencillo
pero esta mierda se ha tragado casi 5 horas de mi vida y no he podido
superar el tercer nivel.
Nuestro
principal trabajo es evitar las lineas que van aproximándose
vertiginosamente al centro del hexágono y para eso podemos movernos
a la izquierda o derecha, cada 10 segundo la pantalla sufre una
alteración en la figura central, complicando cada vez más la
esquiva de obstáculos, para más inri tenemos un botón de reinició
inmediato si llegamos a chocar con una linea que reanuda nuestra
andanza en busca de la felicidad virtual.
El
juego tiene todo para triunfar y ser jodidamente adictivo: colores
brillantes, una música pegadiza y machacona, el simple sistema de
juego, lo endiablados patrones a sortear y la sensación de poca
progresión pero constante. Meterse a Super Hexagon por primera vez
es similar a tu primer viaje alucinógeno; al principio todo tiene
poco sentido, llega a abrumar y puede joderte vivo pero con el paso
del tiempo y repitiendo dosis -en este caso apretar el botón de
reinicio- te vas metiendo cada vez más hasta que tocas el Olimpo con
la punta del pene... o mueres.
Por
el precio actual es una ganga y si te sobra cambio después de ir a
la tienda deberías plantearte seriamente probarlo.
Downwell
Precio:
Mex$ 36
Este
pequeño lo compré durante una rebaja hace 4 semanas por apenas 11
pesos y después de 5 horas de gozar como una perra me arrepiento un
poco de no comprarlo a precio completo -no-. Downwell es el juego
perfecto para esas partidillas rápidas de 2 minutos que se extienden
hasta el infinito. Va de un sujeto que un día decide arrojarse a un
pozo con botas especiales que disparan con el motivo de darle sazón
a su insípida vida y obtener tesoros, muchos tesoros.
Mezclando
mecánicas meramente Arcades con el género Roguelike da como
resultado uno de los títulos más divertidos que he jugado estos
último días. En Downwell somos partícipes de la espectacular caída
hasta el más oscuro abismo de nuestro protagonista, que utilizando
saltos enormes, reflejos de acero y precisión abrumadora para
disparar a todos los monstruos aberrantes que pueblan el camino hasta
lo más hondo del pozo.
El
diseño de niveles se genera de manera aleatoria y al final de cada
una de las fases se nos recompensará con alguna mejora; puede ser
desde llenarnos la barra de vida, crear campos de fuerza o algunas
rotísimas como la capacidad de hacer explotar cadáveres al pisarlos
o un pequeño robot que nos ayudará a extender nuestra masacre. En
total son 12 niveles más el combate contra el jefe final... si
pierdes toda tu barra de energía, tocará reiniciar desde cero.
Artísticamente
es un encanto y cuenta con muchas paletas de colores para
intercambiar por la inicial de blanco, negro y rojo. Los mismo
desarrolladores han dicho que se inspiraron una barbaridad con
títulos de NES y además de emular el estilo de 8 bits también lo
hacen con ralentizaciones cuando somos golpeados o al disparar a
nuestros objetivos y es algo confirmado por estos mismos, es eso o
nos quieren ver la cara al marcarse un mal port de móviles a
compatibles.
Mi
experiencia con los juegos porteados de móviles traídos por Digital
Revolver – o sea Downwell y TITAN SOULS- es curiosa. Por defecto
son ejecutados con la tarjeta gráfica integrada y forzarlos a la GPU
trae una serie de problemas bastante notorios y molestos, cosa
señalada en los foros de Steam de hecho, sin embargo piden una puta
mierda y prácticamente cualquier tostadora puede ejecutar estos
juegos.
To
the Moon
Precio:
Mex$ 110
Ni
de putísima broma podría considerar esto un videojuego, además de
un pobre rompecabezas para examinar objetos no hacemos más que
movernos y tan siquiera podemos cambiar el destino con decisiones de
algún tipo, pero aun así se ha ganado un espacio en mi corazón.
No
quiero revelarles nada, pero la narrativa de To the Moon es de las
pocas cosas que me obligaron a seguir adelante hasta terminarlo 5
horas después. La historia es emotiva y logra llegarnos a lo más
profundo de nuestra alma y acompaña una banda sonora que es tan
dulce que después de terminarlo fui a hacerme un examen de glucosa.
Está
hecho con el omnipresente RPG-Maker con todo lo bueno y malo de este
motor. Además está en español y los 110 pesos bien valen la
experiencia.
Crypt
of the NecroDancer
Precio:
150 pesos
Este
juego me enamoró desde que me enteré de su primicia. Encarnamos a
Cadence que para su mala suerte ha caído dentro de la cripta de un
ser mágicamente poderoso capaz de levantar a los muertos y demás
monstruos, apenas caemos en este sitio este ente nos roba el corazón
y para recuperarlo eventualmente tendremos que hacerle frente, el
único impedimento para llegar a él son cuatro zonas con tres
niveles cada una que nos obligará a luchar contra una horda de
monstruos de ultratumba... mientras bailamos.
Similar
a un juego de ritmo, esto va de atacar y moverse al son de la
canción. Cada piso tiene un ritmo diferente que tenemos que respetar
si no queremos morir miserablemente. Se omite el uso de botones y
sticks, centrándonos en las teclas direccionales para avanzar y usar
nuestras armas, objetos curativos y hechizos; suena engorroso pero 5
minutos bastan para hacerte con el peculiar control a la perfección.
Más
que incursionar en macabros calabozos Cadence llega a una fiesta
donde un desfile de esperpentos se mueve al ritmo de la música,
inclusive el piso enciende y apaga similar al de una clásica
discoteca Y ESO ME ENCANTA PORQUE ES UNA PUTA LOCURA. Además de
poner a prueba nuestras capacidades rítmicas el juego tiene todos
los elementos básicos de un Roguelike -este género me está
gustando mucho-: Mapas generados al azar, mejorar poco a poco nuestro
personaje, aprender los patrones enemigos y aprovechar al máximo las
armas que aparecen escondidas en cofres o que vende un simpático
vendedor cantor. Con el tiempo seremos capaces de matar dragones con
una enorme espada mientras vamos equipados con traje de Karate y
casco de minero al mismo tiempo que lanzamos fuego a todas
direcciones y arrasamos en la pista de baile junto a esqueletos y
fantasmas; simplemente hermoso.
Eso
sí, avisados están de que si los juegos de ritmo te parecen
repetitivos no recomiendo acercarse a este... que morir tantísimas
veces y repetir los mismos tres pisos moviéndose de la misma forma
puede cansar a bastante gente.
Y
hasta aquí llegamos gente, 4 títulos que se han ganado mi
aprobación con creces y que valen todo sus MB en oro, si alguien de
la sala ha probado uno o más de los expuestos estaría de lujo que
se pasara a comentarlos qué le pareció la experiencia.
Saludos
a todos.
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