Esta obra de culto ha ido ganando relevancia con el pasar de los años gracias a la enorme cantidad de textos y videos dedicados al tema a lo largo de la internet centrándose sobre todo en los surrealistas parajes que el juego invita a recorrer. A pesar de que la web está repleta de gameplays de personas afirmando haberse asustado, además de ser carne para creepypastas de todo tipo, en realidad LSD jamás buscó ser catalogado como un juego de terror.
LSD:
Dream Emulator se vendió como un producto que conformaba una
experiencia más grande, incluía una serie de discos con música y el diario de sueño de uno de los desarrolladores, máxima
inspiración para la realización del juego. De los tres pilares el
más destacado fue este producto de PSX; el poder de la emulación y
su distribución digital en la PS Store japonesa ayudaron a que un
buen puñado de jugadores girara la cabeza a verlo y empezaran a alucinar
bien duro y macizo, era cuestión de tiempo para volver este leyenda
en algo muy popular.
Dada
la naturaleza aleatoria, que hace difícil a los jugadores tener una
partida idéntica, no podría confirmar a partir de qué
sesión pasan cosas lo suficientemente surrealistas para evocar tensión o mal rollo; pero sí hay elementos en común que pueden encontrarse en
prácticamente todas las partidas.
Los
escenarios pueden tener un mapeado diferente a la par de presentar o
no ciertos elementos, pero comparten una base que los hace
mínimamente identificables: como una zona rural japonesa, el
interior de un castillo, algo similar a un campo y el más icónico
de todos; una ciudad cuyo nombre oficial es "Violence District". No por nada la urbe es uno de los elementos
más conocidos por los jugadores, fácilmente es el lugar más
tétrico gracias al ambiente urbano nocturno y porque:
Tenemos
a gente colgada de las lámparas.
Pongámonos
en situación. Estás en medio de una sesión y te has transportado a
una avenida completamente vacía, alrededor vemos coches aparcados y
al fondo una enorme ciudad cubierta por el velo de la noche;
retomamos la marcha, empezamos a caminar y a lo lejos vemos una
figura simple pero perfectamente identificable como humana colgando
de una farola. Mientras inspeccionamos el sitio escuchamos pasos,
cada vez más cerca. En
medio de la avenida otra figura humana aparece, esta vez parada en el
asfalto, completamente inmóvil parece ser una mujer de vestido largo; nos
acercamos, pero al voltear aparece un extraño hombre de gabardina
gris que se abalanza contra nosotros, no nos mata… pero hace que
despertemos del sueño.
El
hombre gris es uno de muchos NPC del juego pero es de los pocos que
pueden “atacar” al jugador, suele moverse a nuestra posición o
mínimo da la impresión de hacerlo para dar el pego de que el cabrón
nos está siguiendo. Entre las teorías se dice que este hombre es el
responsable de los cuerpos colgados por toda la ciudad, también se
dice que los trazados con gis de siluetas humanas, cuál escena del
crimen, marcan el lugar de sus asesinatos aunque en la wiki se menciona que el verdadero asesino es un chaval con pistola rondado cerca. La ciudad futurista no es
el único lugar donde aparece y se le puede encontrar en la aldea.
Es
interesante cómo un personaje del que apenas se conoce más que su
forma puede volverse hasta cierto punto famoso en algunos grupo y
también lo es el cómo evoca inquietud en muchos jugadores con el
mero hecho de verlo a lo lejos.
Pero
esto no es lo único jugoso. District Violence le hace honor a su
nombre y está repleto de objetos o personajes que simbolizan la
muerte y crimen. Además de poder presenciar gente colgada y extraños
seres en gabardina o chubasquero siguiéndonos en las calles podemos
ver cadáveres tirados, hombres con escopetas apuntándonos e
inclusive una pelea donde un hombre ya hace en el piso mientras otro
lo patea continuamente… dentro de lo más inquietante destaco a una
niña que puede ser observada mientras juega rayuela, francamente inquietante si tenemos en cuenta que está recreándose en medio de la noche en una ciudad sumergida en la muerte.
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